Waiting for my eternity

Cuando somos jóvenes nos equivocamos sin remedio y sin pretensión...necesitamos caernos para sentir, aunque el dolor sea azul y gris nos agrada saber que siempre tendremos el verde en el pincel para colorear y alegrar esa pintura abstracta de nuestras vidas.

También sabemos que nos arrepentiremos después, pero con solo respirar la sensación somos por ese instante radiantes y el perfume de la decepción nunca falta para engalanar el momento ulterior...pero el silencio que se vive en ese momento es insólito, ya que nos hemos encontrado con ese cuento de hadas inimaginado por pequeños segundos, sabemos que será corto este paso, diferente y encontraremos algo encubierto que recién tendremos oportunidad de conocer, puede que sea una vorágine desenfrenada , con colores entre mezclados y cuando veamos el celeste teñir nuestras sensaciones, será muy tarde porque en ese momento ya habremos caído los DOS.